Let's scare Jessica to death

Filmada en 1977, Let's scare Jessica to death es una muestra de cómo hacer un filme de terror con atmósfera tétrica, algo que muchos de los largometrajes actuales han sustituido por el impacto visual de la imagen en pantalla. Aquí la música y el sonido ambiente juega un papel crucial para darle realce a la escena, así como escuchar los pensamientos de la protagonista durante los momentos importantes.

Jessica ha salido de un internado después de seis meses de tratamiento, por lo que su esposo y un amigo deciden llevarla a vivir a un pequeño pueblo para que se termine de recuperar, lo que no saben es que toda la gente del lugar guarda un oscuro secreto relacionado con la casa que acaban de adquirir. Jessica presenciará eventos extraños, que pondran en duda su juicio y la veracidad de sus palabras.
Durante casi todo el metraje, el espectador podrá oír los sonidos de los alrededores (como grillos, viento, entre otros) y aparte la mística banda sonora, que junto con una guitarra acústica, crean un efecto único para las escenas. Si bien la historia va a un paso muy pausado, las técnicas usadas para construir el ambiente lóbrego consigue mantener el interés.
Los acostumbrados a los métodos visuales actuales para inspirar terror, tacharán a esta película de aburrida y sin sentido, pero para aquéllos buscando algo diferente, y que tal vez asemeje un poco al estilo de Rosemary's baby de Roman Polansky, ésta es una buena opción.

I sit here and I can't believe that it happened. And yet I have to believe it. Dreams or nightmares? Madness or sanity? I don't know which is which.

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