1984 fue el año que Lars Von Trier debutó en el cine con este largometraje del tipo noir. El mismo director clama no estar muy a gusto con este trabajo, pues según él carecía de un estilo propio y luce como un ensayo amateur. A pesar de la mala auto crítica de Von Trier, este filme es bastante bueno.
La historia gira en torno a Fisher, un detective que regresa a Europa para investigar un caso, utilizando la técnica del libro su antiguo jefe Osborne (the element of crime), la cual consiste en imitar los pasos del criminal para comprender su modus operandi y predecir dónde dará el siguiente golpe. A pesar de que la sinopsis suena convencional, no lo es, pues la historia se desenvuelve poco a poco, dando pequeños detalles de lo que en realidad ocurre, desarrollando a los personajes, hasta llegar a una conclusión que unos sentirán muy brusca, haciendo pensar que se perdió algo en el camino para comprender la película en su totalidad.
Si algo destaca en este filme es la presentación visual, pues casi todo el filme fue fotografiado en tonos sepia, siendo el azul el único color diferente que por momentos irrumpe en pantalla (la razón es simbólica, y es dada a conocer en el filme).
Con una forma combinada de dirección (producto de lo que Von Trier etiqueta como su "falta de estilo"), una historia oscura, una fotografía destacada y grandes actuaciones, The element of crime es una recomendación para quienes disfrutan del cine noir y de las películas de arte.
I want to wake up now. Are you there? You can wake me up now.
La historia gira en torno a Fisher, un detective que regresa a Europa para investigar un caso, utilizando la técnica del libro su antiguo jefe Osborne (the element of crime), la cual consiste en imitar los pasos del criminal para comprender su modus operandi y predecir dónde dará el siguiente golpe. A pesar de que la sinopsis suena convencional, no lo es, pues la historia se desenvuelve poco a poco, dando pequeños detalles de lo que en realidad ocurre, desarrollando a los personajes, hasta llegar a una conclusión que unos sentirán muy brusca, haciendo pensar que se perdió algo en el camino para comprender la película en su totalidad.
Si algo destaca en este filme es la presentación visual, pues casi todo el filme fue fotografiado en tonos sepia, siendo el azul el único color diferente que por momentos irrumpe en pantalla (la razón es simbólica, y es dada a conocer en el filme).
Con una forma combinada de dirección (producto de lo que Von Trier etiqueta como su "falta de estilo"), una historia oscura, una fotografía destacada y grandes actuaciones, The element of crime es una recomendación para quienes disfrutan del cine noir y de las películas de arte.
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