Kimyô na sâkasu (Strange Circus)

Sion Sono es un director, guionista y escritor japones que tal vez sea conocido por su película Jisatsu sâkuru (Jisatsu circle, suicide circle, o círculo suicida), donde varios jóvenes se suicidan sin motivo aparente. Entre las características de este director está el hecho de que sus historias cambian constantemente; usualmente presenta un tema que hace creer a cualquiera que será la trama principal del filme, para luego girar el transcurso de los eventos y sorprender con algo inesperado. Strange Circus aplica esta técnica incansablemente, cambiando la narrativa y manteniendo a uno interesado en saber cuál será el final que se revelará.

El ambiente onírico puede complicar un poco la comprensión de este relato, sin embargo estas escenas son las que añaden un elemento extra a la historia, volviéndola más interesante. Los tópicos tratados en el filme son muy variados (perversión, abuso de menores, maltrato a lisiados, por citar algunos) y tratados sin censura, por lo que si el espectador no está acostumbrado a las películas fuertes, no será fácil para éste presenciar algunas escenas.
La duración del largometraje es de 108 (en la versión americana le censuraron y bajó a 94 minutos), pero con los constantes cambios en la historia, da la impresión de tardar más. Exponer la sinopsis entera daría lugar a arruinar el factor sorpresa que caracteriza esta película; es mejor verla y dejarse llevar por las escenas que la componen. El final definitivamente es algo que nadie espera y hace que todo cobre sentido (si hay un poco de confusión, basta con recapitular la película).