Cuatro historias que tienen a primera vista dos cosas en común: el actor (Tadanobu Asano, un gran actor que apareció también en Last life of the universe y Zatoichi) y la demencia en el amor. Rampo Noir (Ranpo jigoku) del 2005 es una colaboración de un cuarteto de directores que se unieron para que en dos horas y quince minutos, narren lo enfermiza que puede llegar a ser la definición de amor para ciertas personas.
La primera es la más corta y de corte surrealista, un hombre que forcejea con su mujer hasta una trágica consecuencia; la segunda, es sobre una serie de asesinatos, en apariencia inexplicables, donde a las mujeres se les derrite el rostro; la tercera es acerca de una mujer que guarda un cruel secreto y mantiene cautivo a su deforme marido, torturándolo y tratándolo como un objeto; la última es sobre un hombre con una obsesión por el contacto con el gente, que le propicia una interminable comezón, la cual lo llevará a sumergirse en un mundo irreal que escuda lo atroz de sus actos en la realidad.
Los directores se esforzaron en conservar la estructura gráfica, logrando un buen manejo de elementos en escena (en especial en la segunda historia, con los juegos de espejos) y colores (siendo la cuarta, el segmento con más vida).
Basado en historias de Rampo Edogawa, Rampo noir es un conjunto de dramas, con ligeros toques de terror, bastante recomendable; su estilo es extraño y tal vez sea incomprendido por algunos, pero si disfrutan el cine de arte oriental, ésta es una gran opción.
TRAILER
La primera es la más corta y de corte surrealista, un hombre que forcejea con su mujer hasta una trágica consecuencia; la segunda, es sobre una serie de asesinatos, en apariencia inexplicables, donde a las mujeres se les derrite el rostro; la tercera es acerca de una mujer que guarda un cruel secreto y mantiene cautivo a su deforme marido, torturándolo y tratándolo como un objeto; la última es sobre un hombre con una obsesión por el contacto con el gente, que le propicia una interminable comezón, la cual lo llevará a sumergirse en un mundo irreal que escuda lo atroz de sus actos en la realidad.
Los directores se esforzaron en conservar la estructura gráfica, logrando un buen manejo de elementos en escena (en especial en la segunda historia, con los juegos de espejos) y colores (siendo la cuarta, el segmento con más vida).
Basado en historias de Rampo Edogawa, Rampo noir es un conjunto de dramas, con ligeros toques de terror, bastante recomendable; su estilo es extraño y tal vez sea incomprendido por algunos, pero si disfrutan el cine de arte oriental, ésta es una gran opción.
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