Del 2009 y siguiendo ligeramente la línea que estableció The Machine girl en 2008 (sólo que sin tanta sangre y violencia), High Kick Girl, o Hai kikku gâru! como se llama originalmente, es un filme que relata la historia de Kei Tsuchiya, una alumna de karate que está a la caza de cinturones negros de diversos dojos de su ciudad; sus grandiosas habilidades son captadas por un grupo de maleantes llamados "Los destructores", que se dedican a realizar trabajos sucios para sus clientes. Kei se ve intrigada por la invitación, pero detrás de su ingreso al selecto club, se encuentra un chantaje.
Dos cosas que le han dado fama a esta película es la belleza de Rina Takeda, la protagonista (que en el filme no esta arreglada para exhibir su rostro, sino para mostrarse como una chica dura), y que prácticamente todos los golpes que se ven en escena son reales y no son coreografías fingidas como las de Hollywood.
El desarrollo de los acontecimientos es bastante simple y no tiene nada del otro mundo (no faltara quien la vea como una versión diferente de la antigua trilogía del Karate Kid); esta película debe verse con el mero gusto de buscar entretenimiento y no esperando ver una obra de arte digna de ganar premios de festivales o críticas excelsas respecto a su dirección y fotografía.
El punto en contra que tiene High Kick Girl, aparte de las mediocres actuaciones (Rina es la única que interpreta de manera bastante aceptable su rol), es la excesiva cantidad de ocasiones que utilizan la cámara lenta para repetir ciertos pedazos de acción. Hay escenas en las que sí vale la pena utilizar este recurso, pero repetirlo constantemente puede llegar a ser muy pesado e incluso aparentar que se usó con el propósito de llenar tiempo (la película apenas dura hora y veinte minutos). Otra cosa que a algunos podrá disgustar es que la protagonista queda en segundo plano durante una buena parte.
Los diálogos son pocos y los golpes muchos, por lo que los amantes de la acción estarán felices con esta película. Recomendada para los que quieran pasar un buen rato.
El desarrollo de los acontecimientos es bastante simple y no tiene nada del otro mundo (no faltara quien la vea como una versión diferente de la antigua trilogía del Karate Kid); esta película debe verse con el mero gusto de buscar entretenimiento y no esperando ver una obra de arte digna de ganar premios de festivales o críticas excelsas respecto a su dirección y fotografía.
El punto en contra que tiene High Kick Girl, aparte de las mediocres actuaciones (Rina es la única que interpreta de manera bastante aceptable su rol), es la excesiva cantidad de ocasiones que utilizan la cámara lenta para repetir ciertos pedazos de acción. Hay escenas en las que sí vale la pena utilizar este recurso, pero repetirlo constantemente puede llegar a ser muy pesado e incluso aparentar que se usó con el propósito de llenar tiempo (la película apenas dura hora y veinte minutos). Otra cosa que a algunos podrá disgustar es que la protagonista queda en segundo plano durante una buena parte.
Los diálogos son pocos y los golpes muchos, por lo que los amantes de la acción estarán felices con esta película. Recomendada para los que quieran pasar un buen rato.