
La historia es muy surrealista, al extremo que después de 20 minutos de metraje uno puede quedar perdido intentando descifrar qué está sucediendo en realidad. Algunas escenas son bastante claras con lo que ocurre y parecen crear el camino para comprender el largometraje, pero luego ingresan otras más simbólicas que confunden el significado adquirido con antelación.
Pasando por alto lo difícil de su narración (que incluye temas como el despertar de la sexualidad, vampiros, curas lascivos, y embrujos), la película es un festín fotográfico de colores y tomas que junto con el vestuario y la música, exhiben de manera exquisita los acontecimientos.
Valerie and her week of wonders se recomienda para quienes disfruten de los filmes surrealistas o con un extraordinario despliegue gráfico.
TRAILER
No hay comentarios:
Publicar un comentario